Different day, same shit
Se requiere de mucha desesperación, insatisfacción y desilusión para escribir unos pocos buenos poemas. No es para todo el mundo ya sea para escribirlos o siquiera leerlos. C. Bukowski
reflexiones
Era curioso, a partir de cierta hora los borrachos pasajeros que tenían algo que celebrar u olvidar se esfumaban, satisfechos de haber formado parte de la otra cara de la sociedad se recogían a sus hogares dejando atrás un panorama deprimente: aquellos que incluso más que vivir para beber, bebían para vivir.
También reían, sí, pero era una risa muy distinta; no importaba la diferencia de edad, las razones de cada uno eran dispares, poco importaban también, tan solo ese olor a fracaso y decepción era lo que les unía, la urgente necesidad de escapar; el sentimiento común de no encajar conseguiría, una noche más, hacernos sentir tan acompañados y tan solos a la vez.
También reían, sí, pero era una risa muy distinta; no importaba la diferencia de edad, las razones de cada uno eran dispares, poco importaban también, tan solo ese olor a fracaso y decepción era lo que les unía, la urgente necesidad de escapar; el sentimiento común de no encajar conseguiría, una noche más, hacernos sentir tan acompañados y tan solos a la vez.
...
Fíjate en ti;
(Yo si lo digo
con ánimo
de desprecio)
Maldices todos esos crímenes
que cuenta la chica del telediario
(con la que ya más de una vez
has soñado en cepillarte).
Confirmas con incuestionable seguridad todas esas quejas
que escupe el tipo de la radio
(aquel de voz grave y convincente,
“ése sí que sabe hablar” piensas).
Te detractas, denigras, criticas,
reprochas, maldices, desprecias…
(“serías un buen político”
pienso).
No te engañes… hacer click-derecho
sobre una palabra en el Word
buscando un sinónimo
no hace de ti un tipo distinguido.
Perfectamente podrías haber sido tú
el protagonista
de todos esos crímenes
que cuenta la morena.
(Nunca encontraremos
mayor maldad
que la que habita
en nosotros mismos).
Fíjate en ti.
Fíjate en mí.
(Yo si lo digo
con ánimo
de desprecio)
Maldices todos esos crímenes
que cuenta la chica del telediario
(con la que ya más de una vez
has soñado en cepillarte).
Confirmas con incuestionable seguridad todas esas quejas
que escupe el tipo de la radio
(aquel de voz grave y convincente,
“ése sí que sabe hablar” piensas).
Te detractas, denigras, criticas,
reprochas, maldices, desprecias…
(“serías un buen político”
pienso).
No te engañes… hacer click-derecho
sobre una palabra en el Word
buscando un sinónimo
no hace de ti un tipo distinguido.
Perfectamente podrías haber sido tú
el protagonista
de todos esos crímenes
que cuenta la morena.
(Nunca encontraremos
mayor maldad
que la que habita
en nosotros mismos).
Fíjate en ti.
Fíjate en mí.
A veces
No puedo evitar pensar
que ya es demasiado tarde
para haber hecho las cosas
de un modo distinto.
No puedo evitar pensar
que tome las decisiones incorrectas,
que quizá yo también
pude haber sido feliz.
No puedo evitar pensar
qué hubiera pasado
de haber dicho un “te quiero”
cada vez que quise hacerlo
No puedo evitar pensar
que solo tenía que ganar,
que no podía perder
lo que nunca tuve.
Tal vez,
De haber tenido fuerzas
de volver a levantarme…
De haber dicho que pasaba
de toda esa basura…
De haberme convencido a mi también
cuando te aseguré que aquella sería la última…
… Tal vez ahora,
no estaría escribiendo
estas líneas.
Lo peor de todo,
es no poder evitar pensar
que ya es demasiado tarde
para recibir otra oportunidad.
ignorancia...felicidad
Miró a su alrededor, en un alarde de desesperación, buscando ese foco de luz entre toda aquella oscuridad. Cerró entonces sus ojos y respiró profundamente. El olor a fracaso y resignación no tardo en invadir su mente.
Pensó entonces en un mundo distinto, un mundo en paz e igualdad, un mundo sin hambre, sin mentiras, sin egoísmo, sin cabida para la hipocresía. El aire había llegado ya a sus pulmones infectando todo a su paso, abrió entonces los ojos mientras exhalaba a medida que la oscuridad avanzaba. Pensó entonces en un mundo aburrido, en un mundo superpoblado, un mundo sin metas, ni alegrías ni decepciones, la idea de vivir como cualquier otro ser biológico le aterrorizó.
- Contradicción! digo, Concepción! otra cerveza y un poco de albal por favor!
... En la próxima hora solo tendría que preocuparse en cómo racionar lo irracional.
Hipócritas
Si pudiéramos fingir
nuestra propia muerte,
observar así la poca repercusión
que ésta tendría…
Caer en lo insignificantes
que en verdad somos,
en lo hipócritas
que negamos ser
Quizá entonces,
dejaríamos
de
fingir.
Tengan cuidado aquellos
que deseen la verdad:
Los muertos-vivientes existimos
y desgraciadamente,
no hay vuelta atrás.
Miedo
Si he llegado a temer algo
en estos últimos años
es el miedo a poder llegar a perder
lo aún no conseguido
tras un tajo en las venas.
Si he llegado a aprender algo
en estos últimos años
es que por mucho que esperes nunca llegará;
eso, y que un tajo vertical
...
Oídos dudosos,
abrazos forzados,
miradas vacías,
sonrisas… simples muecas
Apuñaladas que rozarían
el alma
si no hubiéramos
acabado ya con ella
Bukowski estaba en lo cierto:
todo es más fácil
con varios grados de alcohol en sangre
y un chute de irracionalidad.
una más, una menos
[...] Así pues, sorprendía encontrarse entre tal cantidad de alcohol, estupefacientes y olor a tabaco, una mente no contaminada aún (o al menos en menor medida) por aquel hedor que todos nos esforzábamos en despedir.
Comenzaba entonces el ritual: miradas, sonrisas, palabras… así como parecía que hablábamos. Dar con alguien capaz de nadar entre tanta mierda y cadáver ayudaba a uno a ver otra vez la superficie e incluso a coger algo de aire antes de volver a zambullirse. Algo egoísta pensaréis, pero ¡eh! Al fin y al cabo todo era cuestión de integrarse ¿verdad?
No obstante la ilusión solía durar poco, más pronto de lo que desearía aquella mente comenzaría también a contagiarse del hedor que yo mismo creía haber dejado de desprender; o por el contrario saldría huyendo despavorida en busca de su propia luz como tantas antes habían hecho.
Sea como sea ya era demasiado tarde, dejando que todo fluyese como ayer, como mañana, ya me encontraba una vez más copa en mano y droga en sangre, encendiendo otro cigarrillo.
Experiencia...
Con el paso del tiempo
nos vamos haciendo más fuertes:
más hueso, menos carne;
menos persona, más ser;
todo acaba siendo tan efímero,
tan banal.
Lo que antes conseguía dibujarnos una sonrisa
ahora apenas traza una afligida mueca.
Lo que antes nos entristecía
ahora lo llevamos de la mano.
Y entre carcajadas y largos tragos
Se hacen apuestas a ver quién suelta la mayor estupidez.
No nos engañemos (entre tú y yo):
Sabemos que muy pocos seriamos capaces de apretar el gatillo.
Si algo he aprendido es a no participar en este tipo de apuestas:
Ésta sensación de vacío no es la felicidad que deseábamos.
piensa mal..
"Piensa mal y acertarás", escuché una vez,
desde entonces no ha hecho falta ni apuntar...
Aún sabiendo esto, si alguna vez fallas y te sorprenden,
no te lo pienses,
aférrate a ello y agárralo con fuerza
abrázalo con tanta como para asfixiarlo
y aprieta entonces un poco más.
Indiferencia
Todos echamos de menos algún momento pasado; instantes, personas o situaciones que añoramos
(aun sabiendo que si alguien nos hubiera preguntado si éramos felices hubiéramos contestado que no). Absolutamente todos sufrimos de cierta melancolía y remordimiento de no haber hecho las cosas de otro modo, y quien diga que no se arrepiente de nada, o miente, o es más estúpido de lo que ya aparenta.
(aun sabiendo que si alguien nos hubiera preguntado si éramos felices hubiéramos contestado que no). Absolutamente todos sufrimos de cierta melancolía y remordimiento de no haber hecho las cosas de otro modo, y quien diga que no se arrepiente de nada, o miente, o es más estúpido de lo que ya aparenta.
El verdadero problema comienza cuando se echa de menos incluso los momentos malos. Cuando la gente (aún personas) tenían la capacidad de despertar en nosotros algún sentimiento (aunque fuera negativo). Cuando aún existía algún ser con la habilidad de defraudarnos o sorprendernos.
…No creo que exista mayor depresión que esta indiferencia.
vacios
que ni la cerveza
es capaz ya de llenar…
Hay algo que duele más
que caer en la cuenta de
que cada día,
estamos más hundidos y resignados:
Caer en la cuenta
de que hemos olvidado
incluso
del por qué luchábamos.
D.E.P.
Cansado de muertos
con aspecto de vivos
Cansado de mesías
incapaces de dialogar.
Cansado de mentirosos
que defienden sus mentiras.
Cansado de ilusiones
y de sus fracasos
de intentar hablar
y tan solo escuchar
de aparentar reir
y solo llorar
Cansado de morir
Cansado de vivir
Cansado de respirar…
Cansado…
Hoy, cuando por fin creía poder
descansar en paz
aún se escucha
el chirriar de mis dientes
al caer en la cuenta
de no haber llegado
a estar
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